Sunday, September 04, 2005

Lonely Stranger

Domingo, 11 y media de la noche, escuchando Eric Clapton en la Futuro con “Motherless Children”, tema del disco que marcó su regreso a la música en el 74, luego de un oscuro paso por las drogas. Y empiezo a escribir sobre esto, como no tengo más tema en la cabeza, debido a un fin de semana bastante tranquilo. Sin duda que este disco, “461 Ocean Boulevard” forma parte de la banda sonora de mi vida, un disco demasiado bien armado, con una mirada comercial bastante clara pero siempre mintiendo el espíritu del rock como sólo los grandes pueden hacerlo. Básicamente una obra de canciones sinceras, como Give me strength, con esa gran frase pidiendo ayuda y fuerzas para seguir adelante “Dear Lord, give me strength, to carry on”, a través de canciones como esta podemos ver a un tipo que se ha apartado de su camino de ladrillos amarillo, pero que quiere volver al sendero. Sin duda que lo logró, sino no estaríamos hablando del gran Eric en la actualidad. También se encuentran gemas como la versión de “I Shot the Sheriff”, tema original de Bob Marley, pero que convirtió a Clapton en una supestrella de la música. Mi canción favorita del disco es sin duda “Let it Grow”, con buenos coros, armonizaciones, un solo de slide memorable, que pasaría a la historia. En fin, queda claro que me gusta Clapton cierto? Es mi tercer músico favorito, después de Pink Floyd y los Beatles. Más allá de todo esto, qué tiene que tener un músico o cantante para que me guste tanto? Creo que todo se reduce a hacer una música de calidad, sincera, que provenga del alma, y lo más importante, que perdure en el tiempo. Ejemplo claro de esto es Cream, la primera banda de Slowhand, grupo que me encanta y cuyas canciones suenan tan actuales como si hubieran sido escritas y grabadas ayer, aun cuando ya han pasado casi 40 años del primer disco. Eso es lo que vale, dejar una historia detrás, tener una visión de futuro al componer, y mantenerse en el tiempo. El tipo, qué duda cabe, es un maestro y aún cuando se ha mandado sus guatazos, como todos, sigue ahí, firme. Lamentablemente nunca lo he podido ver en vivo, por varias razones, por lo cual no me queda más que disfrutar y emocionarme con los DVD’s que tengo, donde se ve a un músico de primera categoría, nunca superado por las basuras de la actualidad, y respetado por sus pares. Un tipo solitario, un “lonely stranger” como se autodefine en una de sus grandes canciones, que plasma todos sus sentimientos en lo que escribe…en fin, algún dñía me gustaría escribir algo como “Presence of the Lord” o dedicarle una canción a una chica en forma tan directa como “Layla” o tan increíble como “Wonderful Tonight”. ¿Quién no ha tenido una Layla en su vida? Creo que todos, cachen la letra y sabrán de lo que hablo. En fin, Eric Patrick Clapton, un tremendo músico, un icono para muchas generaciones y un gran sobreviviente, como bien dicen, después de la tormenta viene la calma…espero que así sea.

1 Comments:

Blogger Jaime Andrés Gallo Calderón said...

"I shot the sheriff"

me evoca las tardes después de la playa, en Caldera, esperando que desocuparan la ducha.

Sentados en el patio, escuchando la radio del vecino.
Una chela, hambre y saber que en la noche se venía la raja de carrete en la playa.

Clapton, grande.
Bkn que escribai de este putamadre de artista.

Volver del infierno y escribir sobre eso, no lo hace cualquiera.

Layla, es la mina que todos pensamos los 15 minutos antes de dormirnos. Ella es.

eso.

8:34 PM

 

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