….que 25 años no es nada….

Y ya van 25 años…25 años desde aquel fatídico 8 de diciembre, Edficio Dakota, Nueva York, no sé como hubiera reaccionado si hubiera estado vivo en aquella época, y al prender la televisión o radio me hubiera encontrado con algo tan heavy como “John Lennon ha muerto asesinado por un fanático desequilibrado”. Rabia, pena, inquietud…qué se yo, además hay que mencionar que este lugar se cataloga como maldito, no olvidemos que allí es donde Polanski filmó en el 68 el Bebé de Rosemary, donde el personaje encarnado por Mia Farrow esperaba un hijo del diablo, y bueno, luego el asesinato de Sharon tate, la esposa de Polanski, a manos de Charles Manson y sus “buddies”, donde paradojalmente Manson manifestó haberse inspirado en Welter Skelter para cometer estos crímenes...la canción, obviamente, es de The Beatles….cosas del destino.

Pero bueno, mi comentario de hoy es para honrar a Lennon. Durante mi vida he escuchado mucha música, muchos saben que para mí esto es mucho más que un hobbie, por lo tanto, siempre estoy pendiente de lo que está pasando y paso por muchos estilos. Pero siempre vuelvo a The Beatles. La banda más importante de la historia, quienes cambiaron la historia de la música popular mundial, un grupo que empezó como una idea de Lennon para ganar unos pesos y ser famosos…nadie imaginó lo que pasaría después.

Lennon fue un tipo que desde pequeño se consideró un rebelde, no encajaba en su grupo de colegio ni con las personas de su edad o mayores, siempre con la ironía a flor de piel, una actitud contestataria, y con un talento musical innato. Hasta que forma The Quarrymen, grupo de su escuela donde invita a tocar a un pendejo cuico llamado Paul McCartney, quien no le agradaba por completo, pero cuyas actitudes musicales terminaron por convencerlo de que ese era el camino. Y así fue.

The Beatles pasó por muchas etapas, desde los años locos de la beatlemanía, los discos influenciados por el uso de marihuana, hasta llegar a la brillante etapa de la experimentación en el estudio, y donde demostraron que se trataba de una banda brillante. Lennon guiaba este camino, con sus ideologías, su mística, sus canciones brillantes (si alguien lo pone en duda escuche A Day In The Life) y su forma tan particular de criticar al mundo desde una perspectiva musical y social.

Su amor por Yoko Ono, una de las historias de amor más impresionantes jamás vistas, terminó por alejarlo del camino de sus compañeros de banda, metiéndose de lleno en la cuestión social, protestando en contra de la guerra, enfrentando a la mismísima reina de Inglaterra, o sea Lennon, no tenía pelos en la lengua para denunciar lo que estaba mal y ser consecuente con sus ideas.

En el aspecto musical, ni hablar: luego de algunos discos solistas que eran un simple webeo, en la época más brillante de The beatles, edita luego de la separación The Plastic Ono Band, para mi gusto lo mejor que hizo, un disco lleno de canciones magnificas, donde hablaba de su perdida de confianza en todo y en todos (God), su relación con su madre que la mayor parte del tiempo estuvo ausente(Mother) o la visión del amor que tenía (Love). Luego, discos grandiosos como Imagine o Mind Games, lo confirman como un genio creador, abierto a las nuevas tendencias, rodeado de músicos de excepción y siempre dando a conocer su pensamiento sobre la contingencia: hablemos en otros términos, Lennon en muchos aspectos tenía mentalidad de periodista…nada personal.
Luego, se retira totalmente de la actividad musical y publica durante casi 5 años, para salvar su matrimonio, preocuparse de su familia y vivir intensamente cada momento junto a ellos.

Llega 1980, año en que John vuelve al mundo musical con “Double Fantasy”, un disco que en sus letras mostraba al nuevo John, una especie de “pasé por muchos estados, pero acá estoy, un adulto centrado, critico, pero más equilibrado, con una nueva vida familiar y personal”.

Eso hasta que un pobre imbécil, llamado Mark David Chapman, tuvo la “brillante” idea de matarlo a las horas después de que John le firmó una copia de Double Fantasy. Por esa mente enferma, solo pasó la idea de hacer algo para trascender, ser tan famoso como su mayor ídolo. No quedaba otra, las cartas estaban echadas.

25 años van, y la figura de Lennon sigue intacta como siempre, su recuerdo ahí, todos los 8 de diciembre millones de fanáticos estamos todo el día escuchando The Beatles y sus discos solistas, una manera más que especial de honrarlo. Siempre pienso, al igual como me ocurre con Víctor Jara, en que estaría Lennon ahora, como serían sus canciones, tendría algo que decir, algo que criticar, seguiría con Yoko, cómo sería su música, habría llorado cuando murió Harrison, se hubiera reunido con Paul en el Live 8?????? Muchas dudas se asoman, pero lo más importante es que en estos momentos, como otros 8 de diciembre, siento que estoy haciendo lo correcto, ahora escribiendo además esta columna, honrando al mayor rockero de la historia, un tipo sin el cual, sin duda, mi vida no sería la misma. Grande Lennon, aún lloramos tu partida…Give peace a Chance

Respectfully

Emilio Garrido R.